11 de enero de 2009

¿Cuál es el tuyo?



Mis estudios y mi trabajo..que también es el suyo.
Noche de Sábado de color Verde.
Esta razón, esta nueva ilusión hace que tenga ganas de que por fin llegue mañana.


Noches tan decisivas como la de este sábado son las que a Matasanos y a mí nos hacen falta. Para bien y para mal, pero yo me quedo con lo primero. Cuando tomas una decisión hay que estar atenta al frente y olvidar lo que hay atrás, pues el objetivo puede volverse borroso e incluso llegar a desaparecer.

Que fue una noche de preguntas filosóficas y de respuestas reales. Y una noche laarga. Con cervezas laaargas.

Noté cuando se me fue de las manos. Y ahora quiere volver, PERO yo no estoy segura de querer que vuelva. Y se me nota. Me dijo un pajarito en el The Class que es transparencia...

Acabo de irme y ya quiero volver. Falta un mes o una eternidad. Lo mío es esperar.


He conseguido saber
que no estabas esta mañana
entre las sábanas de mi cama

Es fácil.

Sueños.


Quiero saber qué piensas,
qué pensaste
y qué pensarás.
En tu cabeza necesito estar.

Imposible.

Porque tus ojos no están.


¿Y si esta vez me arriesgo y gano?
¿Y si esta vez pienso y pierdo?


Quiero escribirlo todo para no olvidar nada. Quiero guardar esos retazos de felicidad en uno de mis cuadernillos. Y te escribiré a ti que nadie te ha llamado y un segundo más tarde apareces a mi lado. No vale la pena volver atrás. Así que cogeré mi abrigo, mi bufanda y el bolso. Llenaré mis bolsillos de besos y saldré a la calle. Doblaré la esquina y veré tu puerta. Aún no he llegado, pero ya he adivinado tu sonrisa. Tengo mucho tiempo y poca prisa. Una paciencia infinita. Así que aquí oculta tras esa barra dormiré y en sueños cuidaré cada uno de tus movimientos.

Y se muerde las uñas cuando reflexiona.
Pero tiene unas manos preciosas.


2 comentarios:

Marta (Tuki) dijo...

Que sí,maja,que sí,que eres transparente.Y ahora a guardarnos la manta de filosofía para otra noche fría

TQ

Diana dijo...

Es una linda historia... nunca te canses de recordarla.
Qué las cosas buenas si que vale la pena.
Un besito