19 de enero de 2011

Había que...



...contar una cosa. Que si no puedes con el enemigo, únete a él.
Y más si es un apoyabrazos de un bus dirección Pamplona, con salida de la estación de Sants, Barcelona. 
Después de varias horas de pelear a muerte con él, de inventar posturas, de clavármelo en las costillas y en la espalda me di cuenta que la única forma de vencerle era usándolo para lo que es. Un apoyabrazos. Y ahí deje mi extremidad superior derecha hasta el final del viaje. Fuck yeah. 


Estuve con Cazorla, en Vila-real. Viéndole entrenar, con su camiseta en la mano y poco más tarde con su firma en la camiseta que tenía en la mano y un par de fotos en la cámara que tenía en el bolso. Me regaló ese momento Álex por Navidad =)


Lo dicho, superimportante de contar. 


Adiós!