Hoy más que nunca he deseado poder salir de mí y por un rato dividirme, poder observarme sin yo darme cuenta. Intentar conocerme mejor, desde fuera. Sería más fácil y rápido. Posiblemente moriré sin terminar de conocerme completamente. Saber cómo me ven los demás, que seguro es totalmente diferente a como me veo yo. Si resulto odiosa, si no lo hago. Escrutarme, apuntar todo. Someterme a examen y ponerme nota, sin importar el aprobado o el suspenso. Sólo una nota, sólo una opinión de mí misma.
Anoche no podía dormir. Tenía unos conflictos mentales sensacionales. Y pasaba el tiempo y no podía resolver nada. Ni con un tratado internacional hubiera conseguido apacigüar la lucha interna. Estuve tentada de llamar a un par de personas, pero dadas las horas intempestivas en las que me encontraba, desistí.
Conseguí dormirme. Y ahora no puedo recordar los detalles de mi guerra interna. Yo que pretendía firmar la paz esta noche...
Mi pretensión, mi deseo. Saltar de compás en compás sobre un pentagrama. Estar contigo hasta altas horas, de madrugada. Poder decir que es tan tarde, que es temprano. Buscar un escalofrío y encontrarlo, contigo.
Por último, no os podéis perder esta perlita que soltó uno de mis profesores de derecho romano.
''Cuando mis hijos eran pequeños, les decía que la coca cola estaba hecha con los deshechos del armamento americano... Un día me llamó una madre de un niño para preguntarme qué les contaba a sus hijos. Vosotros no bebais coca cola, aunque bueno...combina muy bien con el whisky.''
Y se quedó tan ancho.
A ver si alguien descifra el título.
Idoia, tú no vales. Que ya lo sabes.
1 comentario:
¿en que piensas? tu titulo descifrado. es que de pequeña yo hacia lo mismo
jejej
saludos
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