¿Cuándo imaginaste ser desterrado al país del tuerto donde tú eres ciego? Aquí nadie mira porque nadie ve.. [Café Quijano]
Ya queda menos...Hoy es la última noche que duermo en mi querida cama ^^ Allá sobre las 5 de la mañana me levantaré para ducharme y esperar a que me recoja Marta. La cuenta atrás! Como siempre, aún no me he ido y ya estoy echando a gente de menos..Son cosas que pasan.
Como me ha dicho mi tía ''Disfruta y olvídate de nosotros todos estos días. Olvida lo que decimos y lo que hacemos. Limpia tu cabecita y empieza de cero.'' Ojalá pueda...ojalá. Tengo que empezar a hacer cosas sin pensar si mi familia lo va a aprobar o no. Tengo que dejar de sentirme culpable por ser feliz. Se acabó.
Ayer le enseñé a un amigo este poema que escribí días antes de mi cumpleaños a las tantas de la madrugada. Como todo el mundo mundial y parte del extranjero sabe, no me gusta mucho enseñar lo que escribo porque me invade la vergüenza. Pero esta vez voy a probar. Espero que os guste, de verdad.
No me salen las palabras para dibujar los sentimientos.
No consigo cantar las caricias que no me das.
No puedo evitar mirar la profundidad de tus pupilas.
Aquellos pozos negros que me ciegan.
Quiera poder reventar los índices de la felicidad.
A tu lado. Tú conmigo. Siempre. Inmortales.
¿Por qué siempre de espaldas a la pared?
No quiero ver la realidad. No quiero ver la negativa.
Como tu boca se equivoca. Como mis lágrimas secan tus decisiones.
Me gusta soñarte. Me encanta acunar las ilusiones.
Pero al despertar, cuando me ahoga la almohada,
Cuando las ásperas mantas me arrancan la piel,
Entiendo que no estás a mi lado. Entiendo que nunca lo estarás.
Sal andando. Sal corriendo. Escápate.
Aunque no es necesario que te lo diga.
Ya lo estás haciendo. Sin que nadie te avise.
Que yo voy detrás, en silencio.
Casi sin respirar.
Porque me ahoga la situación.
Porque me quema mi protección.
Sal andando. Sal corriendo. Escápate.
Que yo nunca tropezaré…
No consigo cantar las caricias que no me das.
No puedo evitar mirar la profundidad de tus pupilas.
Aquellos pozos negros que me ciegan.
Quiera poder reventar los índices de la felicidad.
A tu lado. Tú conmigo. Siempre. Inmortales.
¿Por qué siempre de espaldas a la pared?
No quiero ver la realidad. No quiero ver la negativa.
Como tu boca se equivoca. Como mis lágrimas secan tus decisiones.
Me gusta soñarte. Me encanta acunar las ilusiones.
Pero al despertar, cuando me ahoga la almohada,
Cuando las ásperas mantas me arrancan la piel,
Entiendo que no estás a mi lado. Entiendo que nunca lo estarás.
Sal andando. Sal corriendo. Escápate.
Aunque no es necesario que te lo diga.
Ya lo estás haciendo. Sin que nadie te avise.
Que yo voy detrás, en silencio.
Casi sin respirar.
Porque me ahoga la situación.
Porque me quema mi protección.
Sal andando. Sal corriendo. Escápate.
Que yo nunca tropezaré…
Me asusto a mí misma, porque cuando una cosa se pone seria, me entra miedo, me bloqueo, me quedo totalmente en blanco como un libro que sólo tiene escrito el título..y me hago preguntas. ¿Para qué? ¿Por qué? ¿Y luego? ¿Y ahora? ¿Y él? ¿Y yo?
Para acabar, otra cita filosófica. Esta vez me la regala nuestra querida Pili:
Si alguien se enfada, tiene dos misiones. Enfadarse y desenfadarse..Y no te olvides, las amistades hay que cuidarlas, siempre, siempre, siempre... =)
Isabel.
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